'No llegarás a Cascamorras', asesinato en Baza
Lo importante que es tener buenos editores... Y buenos consejeros y lectores número cero que le digan a un autor, con cariño, lo que realmente les ha parecido una novela. Y qué pena da cuando una novela que podría ser medianamente decente queda arruinada por detalles que, fácilmente, podrían haberse cambiado, suprimido o mejorado. Creo que es lo que le ocurre a 'No llegarás a Cascamorras', de Antonio Francisco Martínez, una novela negra ambientada en Baza (Granada), el pueblo natal del autor, en cuya principal fiesta, el Cascamorras, aparece un cadáver envuelto en una tela manchada con pintadas de manos y con la leyenda que da título al libro. Precisamente que esté ambientado en su pueblo, un lugar que conoce a la perfección, es el principal problema. Hay demasiados datos y comentarios que no vienen a cuento y a los que no le veo más sentido que conseguir que esbocen una sonrisa propietarios de bares y restaurantes, de compañías de baile, de personajes de la localidad cuando se lean al pasar las páginas. Quizás a ellos les haga gracia, pero a mí, lectora ajena al pueblo, me han sobrado y me han interrumpido constantemente la lectura del libro. No es lo único que me ha molestado. Hay otra cosa, pero supongo que eso es algo en lo que pocos lectores se fijarán: las referencias a la prensa. Leía titulares y textos de supuestas informaciones periodísticas y mi mano derecha buscaba inconscientemente el bolígrafo rojo de las correcciones. No porque hubiera faltas de ortografía, sino por la redacción de esas piezas, a las que les hubiera dado la vuelta. Pero bueno, ya digo que eso es algo muy mío.
Por lo demás, la novela no está mal. No es un novelón, pero entretiene y uno de los personajes, una criminalista de la Guardia Civil que es la que finalmente descubre quién es el asesino (algo fácil de adivinar para el lector, ya que no hay muchos personajes en la historia), está bastante bien construido.
"En plena vorágine fiestera, junto a los emblemáticos Caños Dorados, la negra marea se paró, los gritos callaron, los relojes se detuvieron, los corazones dejaron de latir, el viento dejó de soplar, incluso la lluvia pareció dejar de caer. Fue como la imagen congelada de una película muda en blanco y negro. El trueno más estruendoso que recuerdan los viejos del lugar no pudo callar los gritos de pánico que siguieron cuando apareció el cuerpo".
Título: 'No llegarás a Cascamorras'
Autor: Antonio Francisco Martínez
Editorial: SoldeSol
Páginas: 232
Precio: 12€
Procedencia: regalo mamá
La portada del libro es graciosa. Lo que cuentas, ya no tanto. Es un problema que tenemos muchos: perdernos en los detalles y olvidarnos de las "tajás", como dicen en la Mancha. Por cierto, hablando de detalles, solo he estado en Baza una vez y hacía un calor insoportable.
ResponderEliminarSaluditos
Sorokin, el libro tiene su gracia y estaría bien si alguien le hubiera dado un buen meneo antes de publicarlo y hubiera obligado al autor a eliminar todos esos detalles que atufan a "quiero quedar bien con tal y con cual". Pero bueno. Yo estuve de niña. Fue mi primer viaje fuera de la isla y el choque cultural fue tan divertido como brutal. No llegaba a los cuatro años y no entendía que existieran sitios sin mar. Ni muchas otras cosas.
EliminarSaludos
Menuda racha de disgustos llevas, a ver si Vicent te lo arregla. Es que cuando un autor mete la pata en algo que conoces tanto, es imposible mirar para otro lado y no cabrearse. Respecto a la guía sobre el pueblo, si alguna vez pienso en ir puede ser una opción pero vaya, no ayuda nada en la historia.
ResponderEliminarCrucemos dedos para que la regata llegue a buen puerto.
Besos Dorothy Rottenmeier
Norah, no te creas. Estos días he leído un libro maravilloso, 'Las voces del pamano', y estoy con 'Patria', que me tiene completamente absorbida. Y sí, 'La regata' llega a buen puerto, ya lo contaré el lunes.
EliminarBesos
Pues esta vez lo dejo pasar, que esos peros pesan. Y con tanto pendiente...
ResponderEliminarBesotes!!!
Margari, contaré hasta tres y olvidarás haber leído esta reseña: 1, 2, ¡3!
EliminarBesines.
Bueno no deja de ser un guiño a sus vecinos pero claro para los demás, como que es normal que esos detalles nos sobren. En fin, como dices, podría haber sido mejor. La editorial no me suena de nada. Besos
ResponderEliminarMarisa, sinceramente, creo que el guiño a los vecinos puede hacerse en un prólogo, en los agradecimientos y en las presentaciones, pero no hace falta que trufes con ellos todo el texto. No, al menos, si no sabes hacerlo bien.
EliminarBesos