La sed de Mortimer, el hijo pequeño (segundón, enclenque, afeminado…) de una buena familia, por Bertha, la prometida de su hermano, el primogénito (fuerte, inteligente, decidido…) puede más que la certeza de que no es tan dulce, tan cándida y tan buena como aparenta. Bertha trata a su futuro marido con frialdad, con distancia, pero juguetea y se muestra pícara con su futuro cuñado, que está completamente embelesado con su perfil marfileño y sus perfectos rizos rubios. No importa que, ya a solas, ella se muestre desdeñosa e incluso desagradable, él mantiene la esperanza de que Bertha acabe siendo suya. Explicado así, ‘El velo alzado’ parece una mera historia de amor y desamor. Pero no. Casi diría que esta novelita de George Eliot es más un relato de terror emocional. Porque es inevitable sentir miedo por lo que le depara el futuro al pobre Mortimer si sigue prendado de ella, si no desiste en la firme convicción de ser su esposo. Desde fuera, siguiendo las palabras, es fácil ver que Bertha juega con él. Se casará con el heredero, aunque seguirá jugando toda la vida a seducir al pequeño. El destino, sin embargo, cambia los planes de la familia. De Bertha. Y de Mortimer, que pronto descubrirá aquello de ‘ten cuidado con lo que deseas porque puede hacerse realidad’. Da igual lo que pasa a lo largo de las páginas de ‘El velo alzado’ (expresión que se refiere a descubrir la verdadera cara de una persona), eso es lo de menos. Lo que importa, lo que te atrapa, son las sensaciones, los sentimientos, lo que no se explica claramente pero se intuye por el comportamiento de los personajes, muy escasos, que pueblan esta historia.
“Mi fin se acerca. En los últimos tiempos he sufrido varios ataques de angina pectoris, y, si todo marcha como de ordinario, tengo esperanzas fundadas, me dice el médico, de que mi vida no se prolongue muchos meses más. A no ser que pese sobre mí la maldición de una fortaleza física excepcional, de manera similar a lo que sucede con mis facultades mentales, no gemiré mucho más tiempo bajo el peso insoportable de la existencia terrena. Si fuera de otra manera –si llegara a alcanzar la edad deseada y prevista por la mayoría de los hombres- podría decidir si el dolor causado por una esperanza decepcionada puede superar al del conocimiento anticipado. Por que sé cuándo moriré y todo lo que sucederá en mis últimos momentos.”
Que maravilla, suena estupendo! Si es que a mi me encantan los entramados psicologicos, donde importa poco lo que pase. Me lo apunto sin duda, que siendo tan cortito, seguro que puedo colarlo en cualquier momento. Besos!
ResponderEliminarXula, a mí, en algunos momentos, me ha recordado a Henry James, por eso de que estás tan pendiente de la psicología de los personajes. Te recomiendo que la leas de un tirón. Es como más se disfruta.
EliminarBesines
Que reseña tan bonita. Me llevo el libro para cuando tenga un momento para él.
ResponderEliminarAlbanta, con un momentito es más que suficiente, porque es muy muy corto.
EliminarUn abrazo
Por tu comentario y por el fragmento que nos citas, parece una novela de esas que se leen en un "plis plas". Me parece también un poco una nueva versión del mito de la "femme fatale", que tiene larga tradición en literatura y en cine.
ResponderEliminarSi me decido a leerla, te la comento, ok?
Petonssssss
Dona, se lee en un plis-plas y sí, es un poco el mito de la femme fatale, aunque no se recrea en eso.
EliminarUn petonet
Jooo este libro me gusta. Me lo apunto a ver cuándo cae. Gracias y besos Dorothy.
ResponderEliminarMarisa, si cae, me lo cuentas. Se lee en un par de horas.
EliminarUn besazo
Bea, la frase es muy buena y, es verdad. A veces nos metemos en la boca del lobo sabiendo que lo estamos haciendo...
ResponderEliminarUn besote
¡Y ánimos!
No tengo más remedio que fiarme.
ResponderEliminar"El abuelo que salto..." al final me gustó más de lo que prometía (me enganchó el personaje, tan sencillamente feliz, tan poco complicado en sus decisiones) y ¡que te voy a decir de "Una forma de resistencia"! (lo leí por tu comentario), parece increíble que pueda hablar tan hermoso de las cosas materiales, que al final son eso... nuestra forma de resistencia.
Gracias.
Reve... ¡Me alegro de que te gustaran esos libros! 'Una forma de resistencia' es tan bello... Te hace darte cuenta de todo lo que dicen las cosas de una persona. A mí de 'el abuelo...' me gustó mucho el personaje de la dueña del elefante, me pareció muy tierno.
EliminarUn besazo
Y gracias a ti por leerme
Me alegro que te haya gustado! =)
ResponderEliminarMe gustó mucho la forma en que estaba narrado... y lo mejor es que se lee en una tarde =)
Besotes
Shorby, es verdad que se lee en una tarde. Lo ideal es leerlo de un tirón y sí, la manera en que está narrado es fantástica.
EliminarBesines
Yo creo que me va a gustar, me llevo anotada (aunque creo que ya la tengo apuntada jeje).
ResponderEliminarUn beso!
Lesincele, te guste o no te guste, al menos te ocupa poco tiempo. Espero, de todads maneras, que te guste.
EliminarUn besote
Es lo ideal para una tarde de esas en los que en ninguno de los 70 canales de tv hay una película en condiciones y no hay ganas de ir al videoclub.
ResponderEliminarBesines
Norah, ¿70 canales? Pues imagínate yo que sólo tengo 27 y que el videoclub tiene unos horarios infames... Ideal para esas tardes, es verdad.
EliminarBesos
Ya lo tenía anotado así que me alegra que corrobores que es una buena lectura... y cortita, genial para una tarde de domingo cuando el marido se va al fútbol ;-)
ResponderEliminarBesos
Lu, a mí me ha parecido una buena lectura, pero no sólo para cuando el marido (o sucedáneo) se va al fútbol, sino en cualquier momento. Además, si él se va al fútbol, mi mejor opción es echar unas risas con las amigas, mejor si hay alcohol de por medio ;)
EliminarUn besazo
Lo de las risas con las amigas yo también lo preferiría pero cuando hay una personita de tres años que al día siguiente tiene que madrugar para ir la cole, la mejor opción es quedarse en casa leyendo, o traerse las amigas a casa ;-)
EliminarBesos
Qué difícil es pasar por aquí y salir sin apuntar cuando toca reseña. Pues me lo llevo, si es que soy una débil... Besos
ResponderEliminarMarilú, al menos, si te lo llevas, éste no ocupa ni mucho sitio ni mucho tiempo ni siquiera mucho dinero. ¡Viva la debilidad! Con el tiempo he aprendido que da más placeres que disgustos.
EliminarUn besazo
Menuda pinta!! No lo conocía, éste es de los que me gustan, me lo llevo apuntado. Espero que estés bien y con todo ya "normalizado". Un besote fuerte!!
ResponderEliminarMeg, todo normalizado después de esa semana 'horribilis'. Bueno, aún con algo de hollín cada vez que entro y salgo de casa, pero ya todo normal.
EliminarUn besazo
PS: ¡Me quedan menos de 50 páginas para acabar el libro! Creo que esta noche cae...
Tus reseñan invitan a leer.
ResponderEliminarNunca he simpatizado con las personas que se dirigen hacia la auto destrucción. Me falta empatía con ellas.
pd: ¿"horribilis"? ¿hollin? ¡¡¡¡¡¡¿has quemado tu casa?!!!!!
Guille, pues no tenemos nada de empatía, porque yo, en ocasiones, tiendo a la autodestrucción.
EliminarTranquilo, que no ha pasado nada. Hace un par de semanas se quemó un coche en el garaje de casa, justo debajo de mi piso. Estuve desalojada, la casa se llenó de humo y aún hay restos de hollín en el garaje, pero ya está.
No conocía este libro pero, por lo que cuentas, parece que podría gustarme. Tomo nota. Abrazo!
ResponderEliminarZamarat, te guste o te disguste, sólo te llevará un par de horas.
EliminarUn abrazote
Me gusta!!!!
ResponderEliminarMuuuuuucho ademas.
Apuntadito queda.
Besos :)
Nieves, espero que no cambies de idea cuando lo leas...
EliminarUn besazo
Pues anotada queda, que es de esas novelas breves que tienen pinta de leerse en media tarde. Aunque, por lo que nos comentas, intuyo que el personaje de Bertha se me va a hacer bastante cuesta arriba. Pero me dejas con la curiosidad...
ResponderEliminar¡Un besín!
Rober, con media tarde igual te sobra un rato y todo. No te preocupes por Bertha, que apenas interviene, es más una presencia que un personaje que aparece todo el rato.
EliminarBesos
Siempre he querido leer algo de George Elliot aunque nunca he sabido por donde empezar: esta obra puede que esté bien para dar el primer paso. 1beso!
ResponderEliminarTizire, es una manera ligera de comenzar con ella, se lee en un momentín.
EliminarUn besote
Querida Geerge Eliot!! Me encanta esta mujer!!
ResponderEliminarBesos,
Carmen, es lo primero que leo de ella y me ha encantado.
EliminarBesines
Sí tiene buena pinta, parece muy inteligente. A mí me has recordado a la visión que de la mujer escribe muy a menudo Joseph Roth. No sé si será de la época de este escritor. Una época en que creo que por estar la mujer con las alas tan cortadas, algunas desplegaban sus ansias de libertad utilizando lo único que tenían, la fascinación que provocaban en ciertos individuos, y así se aprovechaban.
ResponderEliminarCuriosearé, desde luego. No es tiempo perdido lo que traes, :D
Icíar, Eliot era, en realidad, una mujer, del siglo XIX. Y sí, se trata de una mujer que se aprovecha de la fascinación que provoca en su cuñado.
EliminarUn abrazo
Ays, pero como tientas Dorothy! Menos mal que en esta ocasión el libro es cortito, porque es imposible con tu reseña dejarlo pasar.
ResponderEliminarBesotes!!!
Margari, es verdad, es muy cortito. Apenas en un par de horas se lee.
EliminarUn besazo
Corto, buen precio y mejor reseña, está claro, me lo apunto y me lo leo ya. Sabes que me fio de tus consejos.
ResponderEliminarBesitos
Ely, algún día te fallarán porque es imposible que estemos de acuerdo en todo, pero si ese día es con este libro, al menos no habrás perdido ni mucho tiempo ni mucho dinero en él ;)
EliminarUn besote