Jesse Davis: "La belleza llega cuando el músico no tiene miedo de mostrar lo que siente"
Jesse Davis (Nueva Orleans, 1965) ríe con facilidad. Ríe con la boca, con los ojos, con las manos. Pero se pone serio cuando toca hablar de música. Empieza y no pararía nunca. Habla tranquilo, pausado, midiendo bien los tiempos y asegurándose de que se le entiende perfectamente. El saxo es su pasión. El saxo alto. Lleva uno, pequeñito, de oro, en su oreja izquierda. Se queja del calor y la humedad de la isla, pero prefiere sudar la gota gorda a mediodía en una terraza sobre el mar que estar al fresco en la cafetería del hotel, donde no se puede fumar. Enciende un cigarrillo tras otro. Cuento seis en la hora que dura la entrevista, sin prisas ni traductores ni mánagers ni responsables de comunicación metiendo las orejas. Como debe ser, a la antigua usanza, dos personas hablando sin distracciones, sin nadie que señale el reloj o que susurre "dos minutos", sin nadie al que el entrevistado mira con ojos culpables cuando habla de algo que no sea su último disco o su concierto. Una delicia. Casi no parece trabajo. Jesse Davis te lleva de la mano a la Nueva Orleans de su infancia, donde los niños jugaban en la calle a ser músicos, con instrumentos de verdad, o jugaban al fútbol los domingos mientras la música que salía por las ventanas de todas las casas del vecindario se enredaba entre patada y patada al balón. Aquel niño que hoy tiene cinco discos en el mercado recuerda perfectamente el momento en el que descubrió el saxofón. Los movimientos, los reflejos, el estuche, el olor del viejo instrumento de segunda mano... Tras 37 años pegado al saxo, Davis está convencido de que la belleza, en la música, depende del alma del músico, de que se abra, de que no quiera ser otra persona, de que se plante frente al público sin máscaras.
Todo eso y alguna confesión más aquí.
Todo eso y alguna confesión más aquí.
Magnífica entrevista, me encanta el Jazz y me encanta Jesse, qué suerte entrevistarlo. Me alegro que a veces el trabajo duro de fines de semana y horas sin parar se compensen con estas experiencias. Un besote!!
ResponderEliminarMeg, qué lo dices: compensar. Me alegro de que te haya gustado.
EliminarUn beso
Uauuu! por supuesto voy a ver esa entrevista al completo!! Un beso
ResponderEliminarEspero que no te aburras, Marilú.
EliminarUn besazo
Dorothy, me ha emocionado mucho leer esta entrevista, le has sacado mucho a este artista, qué gozada para cerrar el viernes-
ResponderEliminarSaludos
Claudia, gracias. Fue muy fácil hablar con él, la verdad, es un buen conversador, y eso siempre se agradece una barbaridad en este trabajo.
EliminarUn abrazo
Genial la entrevista. Lo que más me ha gustado es lo que dice de que el artista tiene que ser sincero y escucharse a sí mismo para encontrarse. Imagino que al principio es inevitable que quieras imitar al artista que admiras pero luego tienes que ser tú porque si no te convertirás en una mala copia. Da la sensación de que estaba muy a gusto hablando contigo. Muy buen trabajo.
ResponderEliminarBesos
Norah, ¡cuántos artistas hay que no nos gustan porque no nos creemos que sean ellos realmente! Creo que Jesse lo explica muy bien, igual que ese proceso de pasar de querer ser otro artista a buscar el que llevas dentro. Me resultó muy interesante.
EliminarCreo que sí que estaba a gusto, porque no quería que me marchara. Gracias.
Un besote
Magnífica entrevista, Dorothy, muy interesante todo lo que cuenta este hombre. Es curioso que eligiera el saxo tenor, como Charlie Parker, teniendo en cuenta que estudió con los Marsalis (Branford toca el saxo barítono).
ResponderEliminarMe ha sorprendido -como a tí- la respuesta que da a tu pregunta sobre si se puede ser un buen músico sin sentir pasión por la música. Bueno, supongo que, como dice él, sí. De hecho, muchos "profesores" de la Orquesta Nacional tiene un aire totalmente displicente cuando ejecutan (nunca mejor dicho) alguna obra de esas que se saben de memoria.
Besos
Sorokin, muchas gracias. Es que esa respuesta, así, no creo que se la espere nadie. Luego la desarrolla y ya lo entiendes mejor. Esa manera de ejecutar de esos profesores, por muy perfecta que sea, siempre me deja fría. Siempre se nota cuando alguien no hace algo con pasión, hay a quien le da igual, pero yo no lo soporto. Es como Adele y Amy Winehouse. Amy me llega al alma y Adele, por muy perfecta que sea, no me llega.
EliminarUn beso
Privilegios del periodista!!!!
ResponderEliminarQue suerte...
Por cierto, estoy leyendo Ébano. Y es gracias a ti y tus comentarios en la reseña, decirte que me está gustando es poco Dorothy. Me está taladrando el corazón, es fascinante!!!
Me parece de justicia agradecerte tu labor de divulgar estos libros!!!
GRACIAS Dorothy :)
Nieves, ¡qué bien que te esté gustando tantísimo 'Ébano'! "Taladrando el corazón", qué bonitas palabras. Gracias a ti por leer las reseñas y tenerlas en cuenta.
EliminarMil besos
Bea, algo bueno tenía que tener este trabajo sin horario y trabajando muchos fines de semana y festivos. Hablar con alguien interesante y con calma es siempre un regalo.
ResponderEliminarUn abrazo
Siempre me ha gustado el saxo, aunque lo más cerca que he estado de uno ha sido a tres o cuatro metros. Lo mío es el piano, aunque antes se podía decir que me defendía y ahora que destrozo lo que toco. Qué le vamos a hacer...
ResponderEliminarEl talento para la música es como todos los talentos: Se nace con él. Este hombre se nota que ama su instrumento y su profesión y parece un buen tipo.
Me ha encantado.
Un beso.
M., me fascina la música, pero nunca he aprendido a tocar ningún instrumento. Si lo hiciera ahora, creo que me quedaría con el contrabajo. Es escuchar ese sonido grave y siento calor por dentro. A mí Jesse, además de apasionado por lo que hace, también me pareció un buen tipo, sincero, risueño y con muy buen fondo.
EliminarMuchas gracias
Un beso
Fantástica entrevista! Aunque tengo que reconocer que no conocía a este hombre, pero sólo con ver sus respuestas, sólo con ver la pasión con la que habla, me deja con ganas de ver cómo siente él la música, me deja con ganas de escucharlo. Voy a probar suerte en el youtube. ¡Felicidades!
ResponderEliminarBesotes!!!
Margari, gracias. Yo tampoco lo tenía muy controlado, la verdad. Hay cositas suyas en youtube, así que seguro que tienes suerte. Espero que te guste.
EliminarBesos
Me ha encantado todo lo que llegas a transmitir hoy.
ResponderEliminarEl jazz es una música especial, y siempre estoy dispuesta a descubrir nuevos intérpretes.
Besos
mientrasleo, el jazz o te enamora o te horroriza, y yo soy de las primeras.
EliminarUn besazo
Pues, supongo que como a casi todo el mundo, lo que más me ha sorprendido ha sido esa respuesta, se puede ser músico sin sentir pasión por la música. Realista y lógico, si lo miras desde el punto de vista de Jesse.
ResponderEliminarMágico instrumento el saxo, por cierto. Una entrevista fenomenal, como siempre :) ¡Un besín!
Rober, sí sorprende pero es verdad, se puede ser músico sin pasión, tocas las notas correctas, tocas perfecto y ya está. Supongo que, como muchos, él diferencia entre músicos y artistas.
EliminarMuchas gracias.
Besines
Buena entrevista.
ResponderEliminarYo no entiendo de Jazz, eso sí, le tengo mucho respeto a este tipo de músicos y he escuchado a Charlie Parker, como casi todo el mundo.
A mí lo que me ha sorprendido además de ese sí rotundo es que fume tanto teniendo su profesión. Y me ha gustado eso que has dicho de que se ríe con los ojos, con las manos... y lo que dice él de cómo se sintió de niño al tocar.
Besillos
Raquel, gracias. No me extraña que te sorprenda que fume. Cuando me dijo que prefería estar fuera pensé que era para ver el mar, pero rápidamente me mostró el paquete de tabaco. Y cuando vi que se encendía uno tras otro... No lo entiendo. A mí las historias de cuando era niño son lo que más me gustaron.
EliminarUn besote
Me ha gustado mucho tu aproximación al músico y lo que fuiste capaz de extraer de la entrevista. Me encanta cuando dices que sin mirar el reloj durante la conversación esto "casi no parece trabajo".
ResponderEliminarRespecto al jazz, jaja, en eso yo soy del segundo tipo: de las que me horroriza, lo siento. Aunque siempre admiro a alguien que vive con pasión la música...
Petonssssss
Dona, aunque hacer las entrevistas, a veces, no parece trabajo, te aseguro que volcarlas, cuadrarlas y editarlas es una cruz. A mí también me ha horrorizado en alguna ocasión, he escuchado improvisaciones interminables y rarezas a las que no les encontraba ningún sentido, pero por regla general, me encanta.
EliminarUn petonàs
I gràcies!
No lo conozco!!! Ya mismo busco su música, de jazz suelo escuchar a Charlie Parker (que lo conocí leyendo a Cortázar, porque el jazz no es una música que he escuchado mucho en mi vida)...
ResponderEliminarQué bueno este post también!! Entré de casualidad en tu blog y ya sé que voy a volver a menudo.
Un saludo
Eva, bienvenida. Quédate y vuelve todo lo que quieras, como si fuera tu casa. No me extraña que no lo conozcas, la verdad es que no es un músico conocido, pero es maravilloso.
EliminarUn abrazo
¡Jo, Dorothy! ¡Vaya entrevista! Me encanta, me encanta... ¿sigo? De verdad que estaba deseando llegar a esta entrada y me voy contenta, no, ¡muy contenta! Me ha gustado "oír" las palabras de este hombre y esta frase:El suyo era muy fuerte, extremadamente bonito y expresivo. Iba directo a tu interior. Te penetraba, sobre Charlie Parker me ha emocionado.
ResponderEliminar¡Hija mía, eres toda una profesional! Ojalá tus "mandamases" estén enterados y te cuiden.
Besitos
Ely, muchas gracias, Jesse de verdad ama a Charlie Parker y te aseguro que se le ilumina la cara cuando habla de él. No tengo queja de mis mandamases. No están los tiempos para muchas alegrías, pero me cuidan. Me dan muchísima libertad y escribo sobre los temas que quiero y como quiero lo que, en este mundo, no siempre ocurre.
EliminarUn besazo
Muy reflexiva frase y en verdad aplica a más profesiones además de la del músico.
ResponderEliminarSaludos
David de observandocine.com
David, es verdad eso de que es aplicable a cualquier profesión. A cualquier cosa que hagamos, en realidad.
EliminarUn abrazo