Erotismo al calor de los rinocerontes


Fotos: Lorena Portero
 Al final de la calle de la Virgen (llamada así por una pequeña virgen que hay en una hornacina en la fachada de una casa) del casco antiguo de Ibiza está Sa Majesté, el reino de Patrick y Pashat. Un espacio que cobra vida cada verano y que tiene un único objetivo: animar y despertar los deseos e instintos más íntimos. A un lado de la calle, en un local forrado de terciopelo y metal, está la tienda más sensual que he visto nunca. Quizás más adelante os la presente. Al otro lado de la calle, justo enfrente, prácticamente puerta con puerta, está la galería de arte, un espacio que abrieron hace unos años y en la que cada verano presentan exposiciones relacionadas con el erotismo. Para ver las obras hay que cruzar una preciosa puerta de hierro forjado (barrotes fuertes que por la noche da gusto tocar porque están frescos) y una delicada cortina de encaje negro tan transparente que prácticamente deja ver las obras desde la calle. El suelo está cubierto de suave terciopelo morado. Es muy agradable, tras la caminata por la empinada calle empedrada, andar descalza. La pared principal, en la que se exponen las obras más importantes, es de precioso capitoné de piel plateada. Todo en la sala está pensado para que no disfruten únicamente los ojos.


En esa pared cuelgan este verano algunos de los dibujos más destacados de Álex Varenne (Saint Germain au Mont d'Or, Francia, 1939), un reconocido ilustrador y autor de cómics eróticos. Son los dibujos originales, los que, a tamaño mucho más reducido, ilustran volúmenes como 'Corps a corps', 'Erotic opera', 'Amour fous' o 'La correction'. De lejos, sorprende el tamaño de los dibujos. De cerca, con los ojos pegados al cristal, sorprende descubrir que los cuerpos que surgen de las manos de Varenne están formados por tres capas de papel cebolla. una en blanco, otra en gris y una última a tinta china. Esas tres capas dan vida a figuras sensuales y provocadoras, de mirada directa, insinuantes y cargadas de un misterio que ni las posturas más explícitas consiguen desvanecer.


Varenne confiesa con una sonrisa que todo lo que se ve en sus dibujos bebe tanto de su imaginación como de experiencias reales. Pashat entiende a la perfección lo que el artista quiere decir. Hace años, en París, fue una de las modelos de Varenne, a quien admira y con el que no se cansa nunca de hablar y reír. Ella misma muestra una de las ilustraciones, colgada en una de las paredes, en la que se la ve: el pelo negro y corto, flequillo y sus gafas de sol. El francés asegura que todas las mujeres, independientemente de su físico y su belleza, tienen algo erótico y defiende el erotismo por encima de la pornografía. La línea que separa erotismo y pornografía, para él, no se encuentra en lo que se muestra sino en cómo se muestra y en cómo lo procesa cada persona. Eso sí, lamenta que, en estos momentos, el erotismo y la sensualidad estén perdiendo terreno frente a su vulgar hermana, indica mientras Pashat y Patrick, de pie junto a dos curiosas esculturas de rinocerontes, asienten.

 Las dos piezas son, sin duda, lo más curioso de la muestra. Patrick se pasa las noches explicando qué hacen en una sala de arte erótico dos rinocerontes de cobre negro. Todo el mundo relaciona los animales con los supuestos efectos que algunos pueblos atribuyen a su cuerno. Pero no. Estos dos rinocerontes son, en realidad, braseros de un burdel de mediados del siglo XIX. "Estas figuras se usaban para calentar las habitaciones de las casas de citas. La gente iba sin ropa y hacía falta calor para que la gente pudiera dar rienda suelta a sus juegos. Se abría el rinoceronte [levanta la tapa, en el lomo del animal] se rellenaba con carbón y calentaba el espacio", explica Patrick sentándose en las escaleras cubiertas de terciopelo, entre los dos rinocerontes.

Comentarios

  1. Ay los rinocerontes!!!
    Son super salaos =)

    Me parece una muestra super interesante, una pena que me pille tan lejos =)

    Besotes

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    1. Shorby, los rinocerontes me los llevaba yo para mi casa... ¡Me encantan!

      Un beso

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  2. Qué curioso!!ni se me habría pasado por la mente semejantes braseros!!

    Besos

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    1. Marilú, yo también me quedé muy sorprendida cuando Patrick me explicó la historia. Pero es que él y Pashat son auténticas enciclopedias en lo que a sexo y erotismo se refiere.

      Un besote

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  3. Interesante combinación, Los cuernos del rinoceronte se considera un fuerte potencial erótico y con estas ilustraciones forman con un toque irónico un buen equipo.

    Besotes :)

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    1. Nieves, sí, por eso todo el mundo cree que la relación de esos dos rinocerontes con la exposición se debe a las supuestas propiedades de los cuernos y Patrick tiene que explicar una y otra vez que eran braseros de un antiguo burdel.

      Besines

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  4. Interesante la diferencia que hace Varenne entre erotismo y "polno". Estoy totalmente de acuerdo: Una iluminación tenue, una mano suave descendiendo con lentitud en primer plano por un dorso a contraluz, desatando un suje y bajando, bajando, abriendo cremalleras, etc, (me paro ahí) es muchísimo más erótico que esos ejercicios gimnásticos que proponen en los vídeos porno a plena luz. ;-)

    Besos

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    1. Sorokin, yo intentando escribir la entrada en modo congelador para no pasarme y llegáis tú y tu comentario a subir la temperatura... Yo también estoy de acuerdo con Varenne, pero el porno ha hecho mucho daño. Muchos hombres quieren lo que han visto en esas películas: plena luz, posturas cuya única función es que todo lo que se tiene que ver quepa en plano, cero preliminares y nada de juegos. Pues eso, que el porno ha hecho mucho daño...

      Besos

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  5. Confieso que al leer el título de la entrada también he hecho la relación rinoceronte - potencial erótico. Curiosas las figuras, cuanto menos.

    Por otro lado, estoy muy de acuerdo con Varenne en dos cosas: toda mujer tiene su parte erótica, y la "magia" del erotismo está mucho más en lo que sugiere que en lo que muestra. Diferencia fundamental con el porno.

    Besotes!

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    1. Rober, cuando las ves te parecen graciosas, pero cuadno sabes para qué servían, te lo parecen aún más. En realidad Varenne lo muestra todo (hay ilustraciones muy muy muy explícitas) y el considera que la diferencia, además de en los ojos de quien mira, está en cómo se muestran las cosas. De hecho, considera que puede mostrarse absolutamente todo sin cruzar la línea del porno.

      Besines

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  6. Me encanta tu blog entre otras cosas porque nos muestras otra visión de Ibiza a la que estamos acostumbrados. Me gusta conocer la ciudad de manos de alguien que seguro que la vive todo el año desde su más profunda autenticidad.
    Me ha gustado, además, la reivindicación del erotismo frente al porno. Para mí mucho más sugerente.
    Una abraçada!!!

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    1. Dona, si a ti te gusta el blog por eso, imagínate cómo me pongo yo cada vez que veo en la tele uno de esos reportajes que sólo abundan en los tópicos. Hay días que me lo tomo como un programa de humor y me río y otros, otros se me llevan los demonios. Yo vivo en la isla todo el año, pero en julio y agosto la verdad es que apenas la disfruto. Es cuando tengo más trabajo. De todas maneras, siempre encuentro un ratito para ir a mis rincones favoritos, tomarme algo y hasta para confundirse con un turista, que siempre es divertido.
      Yo también me apunto a la reivindicación de Varenne, pero creo que es batalla perdida, con la mayoría de los hombres, digo, si no son tu pareja estable...

      Un petonàs

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  7. Si es que a veces parecemos rinocerontes... Pero creo que puede haber rinocerontes delicados y gustosos de practicar de una manera sugerente y tan ligera que casi parezca que te están tomando el pelo y puedan llegar a acumular, en su interior y en el de la víctima, tal calor y deseo que pueda apetecer pasar al porno más duro en el último momento.

    Te sugiero un beso de refilón.

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    1. David, es que eso es lo ideal, que el estilo porno sea una necesidad final, una conscuencia del calor y las ganas acumuladas, el penúltimo paso antes de caer rendidos.

      Me guardo el beso que tengo en mente, no me vayan a poner dos rombos en la esquinita del blog .

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  8. Como no tengo la suerte de conocer Ibiza, al menos tengo la suerte de que tu nos la enseñas con sus muestras "rinoceró-eróticas", una maravilla, yo personalmente tengo mucho respeto por ciertos animales, son gigantes y con muy mala uva ( claro que por culpa de los humanos también hay que decirlo) a si que mejor en África que es su habitad jejejeje ( aunque estos de bronce me recuerdan al toro este gigante que hay en Nueva York , no se por qué) un abrazo, que tengas un feliz día.

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    1. Jota, tienes razón, los rinocerontes, mejor en África. Yo me muero por viajar a África negra, es mi graaaan viaje pendiente, y verlos en directo, pero de momento no me queda otra que conformarme con estos ejemplares chiquititos de cobre...

      Un beso

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  9. Original esos braseros, sí. Pero más original aún es la galería, ojalá pueda dejarme caer por Ibiza no me pienso perder esa visita, las pocas veces que he visitado tu isla ha sido con prisas y por trabajo.
    Y Varenne me gusta mucho, tengo algún cómic suyo, en francés, no, no lo hablo, pero no hace falta, se entiende todo, todo.

    Besitos

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    1. Ely, ¿tienes cómics de Varenne? ¡Me encanta! Ya pensaba que yo era un bicho más raro aún de lo que tengo asumido... A ver si te dejas caer por aquí con un poquito de tiempo y te llevo a ver la Virgen en la hornacina de la calle más gay de la isla y el espacio de Patrick y Pashat, que es muy curioso. Y sí, con sus dibujos no es precisamente el francés (idioma) lo que hace falta para entenderlos.

      Besines

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