Charlotte lleva el nombre de una mujer que murió joven. Que se suicidó. Como su madre, cuando ella es apenas una niña. El suicidio persigue a Charlotte a lo largo de toda su vida, que no será muy larga. Pero no sufráis, Charlotte, que no es otra que la pintora Charlotte Salomon, no se suicidará. He tenido que esperar hasta noviembre para descubrir el que, sin duda, es el mejor libro que he leído este año. Y no lo habría descubierto si no me hubieran prácticamente obligado porque no me apetecía volver a David Foenkinos. ‘Charlotte’ no tiene nada que ver con
‘La delicadeza’, ese libro que te encanta mientras lo lees y que con el tiempo, cada vez que piensas en él te disgusta más y más. ‘Charlotte’ es una maravilla. La historia, los personajes y, sobre todo, la forma en la que está escrito. Frases cortas. De menos de una línea. Parece un poema. Pero no. Frases cortas porque después de cada una de ellas tienes que tomar aliento. Necesitas respirar. Coger fuerzas para la próxima frase. Para descubrir lo próximo que le pasa y que siente Charlotte. Desde la niña taciturna a la adolescente a la que le niegan un premio de pintura por ser judía. Desde la adolescente que se enamora locamente del profesor de canto de su madrastra a la joven alemana que huye a Francia con la esperanza de librarse del holocausto nazi y la desesperación de dejar atrás todo lo que significa algo para ella. Una vida que no puedes dejar de leer. Por muchas veces que tengas que tomar aliento para seguir. Da igual. Necesitas la próxima frase. Saber qué pasa por la cabeza y los pies de Charlotte.
“Charlotte aprendió a leer su nombre en una tumba.
Así que no es la primera Charlotte.
Antes existió su tía, la hermana de su madre.
Las dos hermanas están muy unidas, hasta una tarde de noviembre de 1913.
Franziska y Charlotte cantan juntas, bailan y ríen también.
Y es algo que nunca resulta extravagante.
Hay pudor en esa forma de practicar la dicha.”
Título: ‘Charlotte’
Autor: David Foenkinos
Editorial: Alfaguara
Páginas: 214
Precio: 17,90€
Procedencia: Préstamo de una amiga
Yo tampoco quería volver con Foenkinos y viendo la temática y el estilo ni lo intenté. Las frases cortas me hacen tropezar porque pretendo leerlas seguidas como una novela al uso para ir armando la historia. Pero ahora me has hecho dudar, eres una mala influencia. Ya me veo en la biblioteca intentando leerla bien a ver si se viene a casa.
ResponderEliminarBesotes Dorothy Frank
Norah, ya digo que si no me hubieran obligado no creo que lo hubiera leído, pero esta amiga, desde que lo empezó, me dijo: "Este libro es para ti". Y no paró hasta que me lo prestó y me lo llevé a casa y lo leí en apenas unas horas. Y le tengo que dar la razón: es un libro muy para mí. Sé que a mucha gente le cuestan las frases cortas, pero está tan bien escrito que se lee bien, están muy hiladas.
EliminarUn besazo
Una temática dura no acta para cualquier lector... supongo.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz 2016 :)
Nieves, es duro, pero está contado de una manera tan delicada que suaviza toda esa crudeza. Vale mucho la pena.
EliminarUn besazo ¡Y feliz 2016!
Tengo muchas muchas ganas de leerlo... es de los que me gustan, aunque sea durillo =)
ResponderEliminarBesotes
Shorby, es duro, pero se lee bien porque está escrito con mucha delicadeza. Es una maravilla de libro.
EliminarBesines
Lo que me pasa con este libro no tiene nombre, y si lo tiene seguro que me asusta un poco. Lo tienen en la biblioteca y cada vez que voy lo tengo en mis manos, lo vuelvo a dejar (no me preguntes porqué). Y cada vez que lo he cogido, ese mismo día he topado con una reseña recomendándolo. Y hoy no ha sido una excepción (por eso ya me he asustado incluso un poco). Lo tuve esta mañana en la mano. Volví a dejarlo. Y ahora llego a tí (con este retraso que llevo en comentarios) y me encuentro con que ha sido una de tus mejores lecturas. A ver con qué cara miro yo este libro la próxima vez que vaya a la biblioteca...
ResponderEliminarUn abrazo
Ana... Pues ya puedes volver a la biblioteca y cogerlo. Creo que el cosmos, las estanterías e internet te están queriendo decir algo... Seguro que no te arrepientes.
EliminarAbrazos
Una novela que te deja, tal y como decís, sin aliento, que te requiere en todo momento y, prácticamente, te obliga a seguir leyendo. Sin dudas, fue la mejor novela que leí en el año. Y como si eso fuera poco, me hizo descubrir a una pintora que me deleitó, sus rostros son un poema, pura emoción.
ResponderEliminarSaludos desde Argentina.