Yo también soy Boris Yellnikoff
Reconozco que después de 'Vicky Cristina Barcelona' mis dudas al entrar en el cine para ver 'Si la cosa funciona' eran más que razonables. Pero a Woody Allen sólo le hicieron falta un par de minutos de cinta para diluir los grandes interrogantes negros con los que me senté en la butaca. Sólo con las primeras palabras de Boris Yellnikoff (Larry David) ya supe que esa película me iba a gustar. No me equivoqué. Como buena cínica que soy no pude evitar reírme con ganas al verme reflejada (hasta cierto punto, por supuesto) en el protagonista. Como nada es perfecto, le encontré un gran pero a la película: ¡EL DOBLAJE! Y es que el trabajo de Evan Rachel Wood (la rubia Melodie) se queda en nada al convertir su acento del Mississippi en algo informe y sin sentido. Y otra cosa. A la entrada de la sala debería haber un gran cartel en el que se leyera: 'El director no se hace responsable del posible aumento en su desconfianza en el género humano'.
Coincido con tu apreciación. Yo fuí a ver la película, como buen seguidor de Allen, pero con reservas. He de decir que reí a gusto. Cada una de sus frases, su personalidad... Quedé encantado y salí de muy buen humor. A pesar del trasfondo filosófico.
ResponderEliminarFuí a una sesión de 7 personas. Se sentó a mi lado una mujer de unos 60 y fue la mejor sesión de mi vida. Entre los comentarios d ela señora y el ingenio del director, acabé pasando una buena tarde.
Y por cierto, el happy end es la gran ironía de la película. Bueno el triple happy end!
Tenemos que tomar un café para hablar más de cine!
Nooo la ironía es un montón de idiotas comentando el trasfondo filosófico... junto a otro montón de idiotas comparándose con el personaje de la película.. claro que si el personaje no fuera un supuesto genio, ninguno se compararía, si fuera un idiota social aun viviendo con la madre y teniendo una vida patética según los standares preestablecidos nadie diría estas pelotudeces.
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